LAS AZAROSAS ANDANZAS DE DOS PÍCARAS PELLEJAS
Iker Ortiz de Zarate
Francia, siglo XVIII. "Flora", la cándida pelleja que rige el burdelito real, teme por su vida. Las estrellas han anunciado la venida de un dragón que arrasará con su fuego el reino y devorará a la corte, si la reina no lo impide, concibiendo un descendiente al trono en su última noche fértil. Pero el rey Luis XVI no logra descendencia, ya que del jardín real languidece el triste lirio… Atemorizada por la profecía, Flora busca a la zorra más osada del reino, aquella capaz con sus artes de revivir el pequeño brote regio. Pero cuando la encuentra y las dos desventuradas parten en ayuda de Su Majestad, insospechados enemigos tratarán de hacer fracasar su heróica empresa. Y es que…
¿Cuál será, cuál será,
el secreto de la zorra
que a la Corte solivianta
y al Rey podría curar?
REPARTO
Teresa Ibáñez FLORA
Ana Gómez Alday SILVESTRINA
Iker Ortiz de Zarate MATACANDILES
Amaia Cid - Asier Santiago QUITAMERIENDAS
Idoia Rebollo - Paloma Strachan VIOLETA
Lourdes Lamas - Marta Ortega REINA
Raquél Velez AGORERA
Paquita Quincoces SERPENTARIA
AUTOR Y DIRECTOR
Iker Ortiz de Zarate
DURACIÓN
90 min
ORTZAI
Pintorería, 39
Vitoria Gasteiz
945 20 38 45
640 33 72 44
Hay ocasiones en que un paisaje familiar traspasa el umbral de nuestros sentidos con una percepción distinta que lo hace nuevo, y nos abre puertas a una dimensión que nos era en él desconocida. Eso es lo que ocurrió el día en que, contemplando el cuadro de Delacroix “La libertad guiando al pueblo” decidí escribir “La Azarosas Andanzas de Dos Pícaras Pellejas”.
Este cuadro apasionado, que tantas veces había contemplado con admiración y con la sensación de intuir en él algo que no alcanzaba a definir, me reveló una nueva faz el día que me pregunté quién era la voluptuosa mujer abanderada que lidera el pueblo levantado en armas. Y retrotrayendo esa imagen a 1789, a un momento histórico más conocido y universal que el que realmente inspira el cuadro, supe que esa mujer abanderada de pechos desnudos, cortesana y madre universal, visionaria capaz de arrastrar multitudes a una victoria gloriosa o una muerte heróica, se llamaba Flora.
"Flora", personaje recreado con total libertad, siempre a caballo entre lo épico y lo prosáico, lo heróico y lo cobarde, lo soñado y lo cierto, abarca en sí misma los colores de esta farsa. Por esa razón se llamó Flora.
Junto a ella, acompañándole en sus aventuras y haciéndole saber el sentir de su pueblo, conduciéndola así al momento que describe el cuadro, "Silvestrina", la refinada sibila ilustrada.
En su camino se cruzará la Madre Superiora "Matacandiles", vigía implacable de incomprensibles preceptos.
Alrededor de ellas pulula el resto de personajes que conducen con sus intrigas y tribulaciones al desenlace de la trama. "La Reina", la Ayuda de Cámara Real "Quitameriendas", la novicia "Violeta" y la prima de "Flora" "Serpentaria", así como la "Agorera" completan el reparto de esta comedia farsesca.